Y sí, suena raro, estoy completamente de acuerdo contigo, a nosotros nos pasó lo mismo cuando lo escuchamos por primera vez. Me recuerdo que recorríamos la magnífica Bali y decidimos entrar a un pequeño restaurante, un poco perdido en la ciudad y que tenía un letrero que decía “warung”, después nos esteramos que hay muchos de esos, y son negocios más bien simples, baratos y familiares, en los que puedes conocer la comida típica de Indonesia 🇮🇩. Y fue ahí donde por primera vez escuchamos la palabra tempeh.
Pues bien, ¿Qué es el tempeh?, Es un alimento procedente de la fermentación controlada de legumbres, tales como: poroto de soya, garbanzos, arvejas, porotos negros y rojos, entre otras. Aunque también se puede hacer tempeh con cereales, o bien, mezclar ambos.
Para que podamos fermentar las legumbres, se necesita un hongo 🦠 llamado “Rhyzopus Oligosporus”. Es gracias a él que puede ocurrir la fermentación, sin él y las condiciones necesarias requeridas, sería imposible obtener el tempeh.
Sabemos qué es, pero aun nos cuesta poder imaginarlo, para ayudarlos un poco y hacernos una idea mental, te contaré que su aspecto es parecido a un pastel de color blanco, o parecido a un “Turrón”, su consistencia es más bien compacta y firme.
Con respecto a su sabor, hemos escuchado las cosas más raras que se puedan imaginar, me recuerdo una vez que me dijeron: “Tiene sabor a Jaiva 🦀”, creo que ese se lleva la medalla de oro por lejos (recordemos que es un alimento vegano 🌱). Pero si tuviéramos que llegar a un cierto consenso, creo que su sabor es similar a las nueces 🐿️ o un queso maduro 🧀.